Hormigón en masa recién vertido en zapata corrida como base de limpieza
Material aglomerado que resulta de la mezcla de árido grueso (grava), árido fino (arena), cemento y agua.
El cemento es el aglomerante habitual, aunque también se pueden utilizar otros como la cal (en restauraciones). El “hormigón en masa” es el material tal cual, sin adición de barras de acero; cuando éstas se incorporan se obtiene el “hormigón armado”.
En cimentaciones, el hormigón en masa tiene dos variantes:
- Hormigón de limpieza: es una fina capa de hormigón en masa (de 5 a 10 cm de espesor) que se vierte directamente sobre el terreno para evitar que el hormigón armado del cimiento contacte con las tierras y haya contaminación.
- Hormigón ciclópeo: se obtiene cuando al hormigón en masa se le añaden piedras de gran tamaño. Cualquier elemento de hormigón fabricado en taller y suministrado endurecido y moldeado (con su forma definitiva para ser dispuesto así), se denomina “hormigón prefabricado”
Como prefabricado, el hormigón tiene más aplicaciones que las estructurales. Así por ejemplo, las baldosas de terrazo de grano grueso y algunas piezas de las denominadas “piedra artificial”, concretamente aquellas que llevan en su composición árido grueso además del árido fino, son realmente hormigones. También se utilizan frecuentemente pavimentos continuos de hormigón, como los siguientes:
- Pavimento de hormigón fratasado: se utiliza preferentemente en garajes y consiste en una base de hormigón más una capa de rodadura muy resistente al desgaste porque los áridos son especiales (de cuarzo, sílice, corindón …) y porque finalmente se pule (fratasado), confiriéndole el pulido una textura lisa y de poro muy cerrado.
- Pavimento de hormigón impreso (o aplantillado): se utiliza normalmente en urbanizaciones (paseos, calzadas …), y consiste en una capa de hormigón contra cuya superficie se estampan unas plantillas de goma con dibujos variados.