Ceja en aplacado
Resalte entre dos baldosas de suelo, de aplacado, o de alicatado. En general, resalte entre dos piezas cualesquiera que deberían estar enrasadas.
Las cejas pueden ser admisibles hasta un cierto límite (tolerancia) cuando la unidad constructiva está realizada con baldosas colocadas ‘in situ’ una a una, pues se admite que la colocación artesanal no puede alcanzar la perfección. Una medida tolerable puede ser un milímetro; lo que se intenta evitar es el tropiezo.
En cambio, no se admiten cejas en pavimentos que son pulidos una vez colocados (por ejemplo, el mármol), pues el pulimento debe igualar o enrasar una ceja tolerable; si no lo hace es porque la ceja es muy pronunciada y por tanto intolerable.