Indicaciones base para la realización y levante de las tabiquerías de ladrillo. PL-1

pág. 4 DOCUMENTOS DE ORIENTACIÓN TÉCNICA EN EDIFICACIÓN PARTICIONES – Indicaciones base para la realización y levante de tabiquerías de ladrillo (Pl-1) Las miras deben estar correctamente aplomadas y alineadas con todos los cambios de dirección y marcando los distintos elementos existentes. La distancia entre ellas deberá ser tal que se garantice que el cordel (cuerda atirantada) no presente alabeos ni desplazamientos. Además de la mira inicial, final y las que fuera necesario colocar en posiciones intermedias, se colocarán otras por cada punto singular que hubiera. Sobre las miras se hará un escantillado detallado marcando donde irán cada una de las hiladas, así como un escantillado general de alturas de toda la planta, para lo cual se marcará la cota de referencia de 1m tomada desde el punto más alto del dorso del forjado (nos ayudaremos para ello de un nivel de agua). Será necesario dimensionar el grosor5 que deban poseer los tendeles (los cuales tendrán que ser iguales en todas las hiladas) para que el ajuste de la tabiquería con el forjado superior se haga con piezas completas y no sea preciso (en lo posible) cortar los ladrillos, lo que nos permitirá obtener una mayor calidad de los trabajos, menor desperdicio de material y un mejor rendimiento laboral de la puesta en obra. La colocación del material cerámico en las hiladas se hará mediante el sistema de ‘restregón y muñequeo’, que es la manera tradicional de disposición. Esto es, no se coloca el ladrillo solo en sentido vertical sobre el mortero, sino que además simultáneamente se hace un movimiento lateral para que la masa se introduzca en la nueva llaga que se conformará. En general, la mezcla de agarre deberá macizar la totalidad del espesor de las juntas, para lo cual se retacará con la paleta hasta conseguirlo. Si durante la colocación de las piezas, el mortero no hubiera rebosado por alguna de las juntas, se añadirá la cantidad de mezcla necesaria. Después de ello, se retirará el material sobrante para quedar enrasado respecto a los planos laterales del paramento. La última hilada es muy aconsejable que se reciba con pasta de yeso (por ser más elástico que el cemento); e incluso, adicionalmente puede recibirse una hilada intermedia con yeso cuando el tabique tenga cierta altura o el forjado posea vanos con luces importantes. Si el tabique se realizara con LHS puede estudiarse tomar 1 de cada 5 hiladas con yeso en lugar de con mortero, con el fin de dar una mayor y más rápida estabilidad durante el propio proceso de levante6. Aunque no es muy normal hacerlo así, antes del retacado de la tabiquería con el forjado superior es preferible dejar pasar unas 48 horas para que las juntas hayan fraguado bien. Además, en lo posible, la ejecución de fachadas y particiones viene bien hacerla desde las plantas superiores hacia abajo con el objeto de evitar la entrada en carga de los tabiques inferiores debido a la acumulación de las flechas instantáneas sucesivas de los forjados superiores ya cargados (con las consiguientes deformaciones y la aparición de fisuras en la tabiquería.). En las particiones cerámicas es sumamente importante respetar las leyes de traba. Así, dentro del paño, cada hilada se dispondrá de forma que cada llaga (junta vertical de mortero) se sitúe en la mitad de la longitud del ladrillo que está en la hilada inferior y superior (colocación a ‘mata junta’), no debiendo quedar solapes inferiores a un 1/3 de la longitud de la soga (dimensión mayor del ladrillo). Al mismo tiempo, la unión de cada paño con otro (ya sea en encuentros en L, en T o en X) se hará de tal forma que exista una trabazón total entre cada tabique, haciendo el engarce por cada una de las hiladas (y de no ser posible en alguna ocasión puntual, cada dos hiladas). Por esta razón, el avance longitudinal de los paños se hará quedando las necesarias endejas y adarajas como esperas para la conexión con las restantes particiones. En el caso de encuentros entre paredes realizadas con ladrillos de distinto formato, el enjarje no será posible, por lo que en este caso habrá que recurrir a la inserción de flejes metálicos que lo supla. Para asegurar un buen recibido de la carpintería interior y su encuentro con los ladrillos, se tendrán en cuenta los criterios y consejos expresados en el Documento Pc-2 (recepción, montaje, control, etc.). Las rozas se harán verticales u horizontales, pero no oblicuas. Se cuidará que su profundidad no sea tal que seccione el espesor total del tabique. Se macizarán convenientemente. 5 Grosor o altura de los tendeles: Las juntas horizontales de mortero de cemento tendrán, en general, entre 1cm y 1,5cm. Si se empleara yeso como pasta de agarre, el espesor de las juntas verticales y horizontales se recomienda que no sea mayor a 0,5cm. En su caso, según prevea el proyecto, es posible que debajo del primer tendel se especifique la colocación de una banda elástica en el arranque del tabique. Por otro lado, en determinadas situaciones (como en épocas calurosas o con presencia de aire seco), puede ser conveniente proceder a la humectación del material, lo que evitaría la succión del agua perteneciente a la junta de mortero. 6 Arriostramiento: Cuando un tabique recién efectuado no esté arriostrado por tabiques perpendiculares y quede expuesto a la acción del viento, es probable que sea conveniente colocar puntales laterales recibidos con yeso para garantizar la estabilidad durante su fraguado. Esto puede ser más necesario cuando la tabiquería se decide hacer antes que las fábricas de fachada y medianería. El criterio general será hacer los tabiques después de acabar la cubierta y las fachadas. Fig. 6: Recibido de la última hilada con pasta de yeso Fig. 5: Deficiente relleno y macizado de las llagas en una divisoria-separadora realizada con ladrillo perforado

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