-Detalle 1- Vista del arranque de una fachada de ladrillo cara vista, ejecución de las capas en la zona del zócalo y encuentro con acerado anexo. Descripción La zona inferior de la fachada es aconsejable diseñarla mediante la incorporación de un revestimiento protector (normalmente, un aplacado). Dicho revestimiento (zócalo) resulta conveniente para protegerla de salpicaduras, deterioros accidentales y vandalismo. Las primeras hiladas de ladrillo, sobre las que se asentará el zócalo, se ejecutarán retranqueadas o serán rebajadas (cortadas en superficie), para que una vez terminada, todo el plano de la fachada sea sensiblemente continuo y la coronación del zócalo quede protegida ante la escorrentía que pueda bajar por la parte superior del paño. Así, lo primero a realizar será embastar con mortero de cemento la superficie de las hiladas a revestir (según el tipo de ladrillo puede ser aconsejable la aplicación de un puente de unión). Sobre el embastado, se extenderá un adhesivo (adecuado a la naturaleza de los materiales a utilizar). Como coronación del zócalo, se coloca una tapeta continua que estará sellada en su parte superior. Cabe destacar, lo recomendable de disponer en esta zona una barrera impermeable (lámina de PVC o de LBM), con la finalidad de evitar la ascensión de humedades por capilaridad. Primera hoja de la fachada Barrera impermeable ≥ 15 cm ≥ 30 cm Sellado de encuentro Zócalo de granito Solado de la acera Adhesivo extendido con llana de dientes Embastado de mortero de cemento Elemento independizador de la acera Plano de apoyo retranqueado (rebaje del ladrillo) Tapeta lineal de remate COLECCIÓN serie FACHADAS 48
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