- La realización de estos tabiquillos es aconsejable que se efectúe con ladrillo hueco doble (espesor de tabicón), dejando el uso del ladrillo hueco sencillo (espesor de tabique) para casos puntuales: con poca altura de coronación y cuando la distancia entre sí de los tabiquillos sea reducida. Por el contrario, para casos especiales, para ciertos tabiquillos bajo la cumbrera, para tabiquillos con mayor separación entre calles, para los que sean muy altos o con más carga… puede pensarse en disponer el ladrillo de forma acostada (levantar una citara en lugar de un tabicón), o incluso –si fuera preciso–, realizarlo con ladrillo hueco triple. - La separación horizontal entre los ladrillos se hará distanciando éstos un cuarto de su longitud (las piezas cerámicas se apoyarán solo por sus extremos). Debe considerarse un error grave el ejecutar tabiquillos sin huecos entre los ladrillos, pues inhabilitaría la ventilación cruzada del aire, conformando múltiples cámaras estancas bajo el tablero que favorecerían la aparición de condensaciones. - Se asegurará que los huecos entre ladrillos de cada hilada, queden cerrados superiormente por la hilada siguiente, manteniendo la misma separación entre ladrillos que en la primera hilada. En su levante, se verificará que los tabiquillos estén perfectamente alineados, aplomados y con la inclinación superior adecuada a la pendiente prescrita. - La coronación de los tabiquillos no debe finalizarse en cada hilada con el ladrillo cortado en cuña sin más, pues haría que el tablero cerámico no tuviera un apoyo continuo y homogéneo, dado que en muchos puntos tendría un espacio hueco debajo. Para mejorar este hecho, debería ejecutarse, al menos, una maestra de remate superior realiza con mortero de cemento (o con pasta de yeso). Esta maestra deberá estar totalmente fraguada cuando se pongan los rasillones, de forma que no exista adherencia. - Una solución mejor que la maestra antes referida, sería acabar superiormente cada tabiquillo con una hilada continua de ladrillos -Imagen L-, sin separación entre las testas, y colocada con la inclinación que indique el proyecto (paralela a la línea de máxima pendiente: habitualmente un 30 %) -Dibujo 4-. A esta solución la denominaremos ‘tabiquillo con coronación de hilada continua de ladrillo’. serie CUBIERTAS 36 COLECCIÓN
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